Este es un producto de uso farmacéutico y cosmetológico, que proviene de un ave llamada emú, la naturaleza nos ha regalado maravillas a través de sus plantas y ahora también de sus animales.
Éste producto proviene de un ave australiana llamada Emú que se caracteriza por su carne y por su aceite, el cual es utilizado como un humectante y regenerador de la piel. Éste aceite era utilizado por los nativos de esa nación desde hace muchísimos años atrás. Contiene excelentes cualidades que le han ayudado a ser muy consumido en la actualidad por todo el mundo.
Cuenta con unas propiedades que actúan como instigador de las células nuevas, y además hidrata y regenera toda clase de piel. También es utilizado como analgésico, calmando dolores musculares, contiene además un anti inflamatorio que ayuda a la cicatrización de heridas causadas por quemaduras o por otros traumas.
¿Es el Aceite de Emú seguro para usar?
El aceite es curativo y tiene una capacidad increíble de penetrar en la piel. Nuestra piel contiene su propio aceite natural, y el aceite de emú es muy parecido a este, por lo tanto no puede producir ningún tipo de reacción alérgica, en otras palabras, este aceite reacciona bien con nuestro cuerpo y no puede causar efectos secundarios.
Tiene la siguiente composición:
Ácido Oleico 47,9%
Ácido Palmitico 23,3%
Ácido Linoleico 14,7%
Ácido Estearico 8,4%
Ácido Palmitoleico 4,5%
Ácido Linolenico 0,9%
Además entre otras propiedades contiene omega 3, 6 y 9 los cuales son muy importantes para combatir inflamaciones y reductores de arrugas prematuras, es decir aquellas que aparecen antes de tiempo y que son causadas por nuestra falta de cuidado de la piel.
En definitiva un producto que produce gran impacto favorable a nuestra piel, sobre todo devolviéndole su contextura natural y actuando también como analgésico, aliviando dolores y cicatrizando heridas, gracias a sus componentes.